OJANCANO OJANCANO OJANCANO Es un monstruo maligno de la mitología cantábra, personifica el mal entre los motañeses y representa la maldad, la crueldad y la
brutalidad. De carácter salvaje, y fiero. Es un ogro enorme, tan alto como los árboles más altos y tan robusto como los peñascos que sostienen las montañas. Este gigante decomunal, posee un único ojo como los
cíclopes, su voz es grave y prOfunda como los truenos. Tiene diez dedos en cada pie. Su cuerpo esta cubierto de un pelo ápero y rojizo proveniente de sus largos cabellos y su larga barba, de donde le crece un pelo 
blancO. Este pelo blanco es el punto débil del Ojáncano, Y si alguien consigue arrancárselo, el poderoso gigante morirá inmediatamente. Todas las maldades ocurridas por las montañas son obra del Ojáncano. Cuando esta enfadado ciega las fuentes, resquebraja los árboles
arranca el pelo al ganado, esparce el heno amontonado, vuelca carros, atraviesa troncos en los caminos, derriba cercas y muros, rapta mozas... Las cavernas en las que vivieron o viven llevan su nombre. Sólo seres sobrenaturales, como un duende o una Anjana, pueden proteger a los hombres del Ojáncano y castigarlo.
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